ANTECEDENTES
La tinta china es creada con partículas de carbón y hollín.
Originalmente provenían de una piedra llamada suzuri. Es utilizada para la
caligrafía y el dibujo con distintas técnicas.
Generalmente se utiliza para plasmar paisajes, vegetación, montañas, lagos.
En algunas culturas como la egipcia y la romana, se utilizaban
plumas de caña para realizar dibujos y escribir. La pluma, los pinceles, las
plumas fuente y los estilógrafos, todos son ejemplos del variado manejo de la
tinta china. Es muy versátil, pues permite varios métodos de aplicación, desde la técnica aguada, los
trazos cortos, el puntillismo y los ashurados hasta la técnica de contraste y
las plumillas.
Depende de la técnica con la que se habrá de emplear, se
elegirá el sustrato sobre el cual se va a trabajar. Generalmente cuando se
utilizan técnicas aguadas en dónde se deba humedecer el papel, se recomiendan sustratos
de algodón.
La mayor ventaja de ésta técnica es la posibilidad de crear
sombras y luces en distintas tonalidades creando grises falsos (o grises ópticos)
que se crean superponiendo capas de tinta sobre el papel.
Técnica Aguada
Consiste en mezclar agua y tinta en distintas porciones para obtener diversos
tonos de gris. Se aplica con el pincel y es necesario saber cómo diluir y difuminar
cada capa de color para lograr las sobras y luces adecuadas.
Procedimiento:
1.
Define el contorno con una plumilla.
2.
Elabora distintos tonos de gris diluyendo en
distintas porciones la pintura. Es decir, en el primer espacio del godete 1
gota de tinta china y 1 gota de agua, 2 gotas de agua 1 gota de tinta, 3 gotas
de agua y 1 de tinta, etc.
3.
Utiliza un pincel húmedo y uno seco.
4.
Deja en blanco los espacios con mayor luz.
Trazo corto
En la actualidad podemos encontrar plumillas y plumas fuente
recargables, hace algunos años existían las plumillas metálicas, las cuales
eran remojadas en tinta china para crear trazos parecidos a los creados con el
carboncillo del lápiz. Existen varias formas de puntas según el trazo que fuera
necesario crear, ya fueran de punta redonda, biseladas o punta recta, la
plumilla nos permite realizar un trazo contundente y continuo. Sin embargo antes
de que cualquiera de éstos instrumentos existieran, se utilizaban las cañitas y
palillos. Ésta última es una técnica más artesanal que nos permite jugar con
los trazos.
Procedimiento:
1.
Crea tu cañita o palillo cortando en plano la
punta del instrumento.
2.
Remoja la punta en tinta china y aplica creando
los contornos.
3.
Aplica tramas saturando más en las áreas de
sombra y desatura en áreas de luz.
4.
Juega con los trazos que te permite crear esta
técnica.
5.
No sumerjas demasiado la plumilla para no
chorrear el papel.
Contraste
El contraste es la diferencia de iluminación en gama de blancos
y negros, sin el uso de medios tonos. A este tipo de pintura se le conoce como
de “alto contraste”.
Esta técnica tiene un secado rápido ya que no utilizamos
agua para diluir, por lo que no podrás realizar correcciones después de que se
seque. La ventaja es que es más difícil que se corra y podrás trabajar más
rápido.
Es necesario tener bien pensada la intervención de la luz
para entender este concepto.
Procedimiento:
1.
Define el contorno con una plumilla.
2.
Aplica directamente la tinta sin diluir con un
pincel en las zonas de oscuridad y deja en blanco las áreas de luz.
3.
Puedes ayudarte de programas o aplicaciones de edición
de imágenes para saber cómo resaltar las áreas de luz y sombra.
4.
Poco a poto tu ojo se irá acostumbrando y podrás
hacerlo más fácilmente.
hola, quisiera saber si puedo mezclar agua con tinta china para incorporarla en el cartucho de mi pluma fuente,
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